Crítica: Virus (1999)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 1999: Jamie Lee Curtis (Kelly Foster), Donald Sutherland (Capitán Robert Everton), William Baldwin (Steven Baker), Joanna Pacula (Nadia), Sherman Augustus (Richie Mason), Cliff Curtis (Hiko)

Director: John Bruno, Guión: Dennis Feldman & Chuck Pfarrer, basado en la miniserie gráfica creada por Chuck Pfarrer

Trama: El remolcador Sea Star queda atrapado en medio de un tifón y pierde toda su carga. Con la tripulación a punto de rebelarse, el capitán Robert Everton se debate entre el motín y el suicidio; pero el destino parece haberle dado una segunda oportunidad al hallar al buque científico soviético Vladislav Volkov abandonado en alta mar. El problema es que nadie parece haber sobrevivido a lo que parece ser una feroz masacre librada dentro del barco; pero al hallar a Nadia, una de las oficiales científicas de a bordo, el misterio comienza a dilucidarse. Según Nadia, el Volkov fue alcanzado por una señal magnética de procedencia alienígena, la cual parece tener vida propia y se ha apoderado de todas las computadoras y los laboratorios del barco… y la que pronto comenzó a construir una raza de androides, los cuales terminaron por asesinar a todos en el navío. Y aunque el relato de Nadia parece una locura, los hechos demuestran su razón cuando los ataques comienzan y los miembros del Sea Star comienzan a caer de uno en uno. Es entonces cuando la oficial Kelly Foster deberá tomar una decisión crucial: combatir la amenaza hasta el final o hundir el barco, evitando que la entidad alienigena entre en contacto con el resto de la civilización y se expanda por todas las computadoras del mundo, convirtiéndose en una amenaza real para toda forma de vida en el planeta.

Virus (1999) Virusque no debe confundirse con apocaliptico filme japonés de 1980 sobre un virus que devastaba todo tipo de vida sobre la Tierra – es un vulgar rip off de Alien: otra vez una tripulación atrapada en una nave enorme varada en medio de la nada y enfrentándose a una amenaza de origen extraterrestre. No hay muchas pretensiones mas allá de la de ser un entretenimiento pasable, cosa que ocurre gracias a la presencia de un puñado de actores talentosos que elevan la calidad del material por encima de su propia mediocridad.

La idea de fondo es medio traída de los pelos. Una entidad magnética viviente se ha apoderado de la estación espacial Mir y se ha retransmitido al buque científico que la controlaba. Como un Skynet de segunda mano, se apoderó de las PCs del barco y tomó el control de los 42 laboratorios de robótica que tenía a bordo – ¿para que diantres tendría que tener tantas instalaciones industriales un buque que va al medio de la nada y cuyo único fin es controlar satélites y naves espaciales? -. Esta es la excusa para que el engendro construya un ejército de ridículas arañitas mecánicas, las cuales tienen a mal traer a la tripulación. No contento con eso, el alien hace experimentos mezclando organismos vivos con cibernéticos, lo cual tiene una funcionalidad discutible (y mucho peor son los modelos, los cuales se ven como maniquies empotrados en carritos). El otro balazo en el pie que se dispara Virus es la ridícula teoría que decenas de rusos, armados hasta los dientes y saturados de entrenamiento militar, no lograron vencer a la amenaza alienigena, cosa que sí terminarán haciendo siete marineros fuera de estado y pasados de alcohol. Las ridiculeces abundan – son todos tipos re-curtidos, excepto los carilindos Jamie Lee Curtis y William Baldwin; en ningún momento se ponen de acuerdo para atacar la bodega principal (donde está el bicho) sino que se pelean por su parte del botín y prefieren llegar a tierra cuanto antes para reclamar el rescate; y los engendros nunca dan la impresión de ser agiles o letales, pudiendo ser fàcilmente derrotados con toda la artilleria que tienen a mano -, pero uno no se pregunta demasiado estas cosas ya que la historia entretiene y siempre está en movimiento.

La gracia del filme es la tripleta de actores principales, los cuales actúan como si éste fuera un filme mucho mejor de lo que realmente es. El que se lleva todos los premios es Donald Sutherland, componiendo uno de sus usuales villanos tan inteligentes como retorcidos; el resto del cast es carne de cañón descartable, personajes de stock para ser devorados por el engendro de turno de un momento a otro.

Yo no me ensañaria demasiado con Virus; hay buena producción – a cargo de Gale Anne Hurd, la ex de James Cameron -, buenas performances y una historia que bordea lo pasable. Quizás el peor pecado es que no asusta y los maniquies son demasiado evidentes, amén de que la historia está plagada de improbabilidades; pero es entretenimiento liviano y descartable, lo cual para mí está ok.