Crítica: Inframundo: Guerras de Sangre (2016)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2016: Kate Beckinsale (Selene), Theo James (David), Tobias Menzies (Marius), Lara Pulver (Semira), Charles Dance (Thomas), Bradley James (Varga), James Faulkner (Cassius)

Director: Anna Foerster, Guión: Cory Goodman

Trama: Selene es perseguida sin piedad por vampiros y lycans. Ambos bandos desean llegar hasta su hija, una híbrida de ambas razas que posee poderes impresionantes, y cuya posesión puede determinar la victoria en esta guerra. Para los vampiros, es una decisión desesperada – los lycans tienen en Marius un nuevo líder que ha organizado a la horda y ha asestado golpes mortales contra la mayoría de los nidos de los seres nocturnos -, y por ello la consejera Semira decide dictar una amnistía. Poniendo como garante al anciano Thomas y su hijo David, Selene decide regresar para entrenar las fuerzas novatas de los escasos aquelarres de vampiros que aún quedan en pie. Pero todo es una trampa, y pronto queda en evidencia que Semira sólo desea tomar la sangre de Selene para descubrir donde está la chica y obtener sus poderes. Rescatada a tiempo por David, ambos huyen hacia el norte donde queda un aquelarre separatista, conformado por vampiros que han experimentado con la muerte y han descubierto sus secretos. Allí Selene es curada e instruida en las artes de la muerte; pero Marius la ha encontrado y se apresta a arrasar el lugar, informado por quintacolumnas que forman parte de la raza vampírica y que sólo desean el fin de la guerra. Es entonces cuando la portadora de muerte deberá resurgir de sus cenizas y asestar un golpe mortal a los lycans antes que éstos decidan exterminar a su raza, para lo cual utilizará los poderes espectrales que ha adquirido. Pero quizás ya sea demasiado tarde, y un solo guerrero no sea suficiente para dar vuelta el resultado de la guerra, una que ha durado siglos y que parece estar a punto de resolverse esta misma noche.

Critica: Underworld: Blood Wars

    Inframundo: Guerras de Sangre (2016) Algunos filmes existen simplemente porque son tan baratos de producir que, con que recauden algunos pocos dólares, ya generan alguna ganancia. Es un tema recurrente en las peliculas de horror patrocinadas por Jason Blum (el mismo de Actividad Paranormal, el cual se ha convertido en una especie de Roger Corman del nuevo milenio con producciones como La Visita, La Bahía, Insidious, Hush, La Purga y un larguísimo etcétera), pero también ocurre con otras sagas super conocidas que, sorprendentemente, recaudan mucho menos de lo que uno imagina – como el caso de John Wick, que costó 20 millones y recaudó 86 -. Lo mas curioso de esto es que todos esos filmes (que no entran en la liga del billón como las películas Marvel y Star Wars) generan mucho mas ruido de crítica que de público, obteniendo reviews fantásticas y puntajes altísimos en RottenTomatoes. Pero, así como existe esto, también está el otro lado del mostrador con franquicias indigeribles que siguen generando dólares de manera impensada y permanente. Además de los eternos filmes de Medea de Tyler Perry está Underworld, una saga a la que nadie quiere ni que nadie ve, pero que sigue dando réditos modestos en la taquilla. Es curioso cómo con una premisa tan interesante – una guerra secreta entre vampiros y hombres lobo – no han generado algo formidable o mínimamente memorable. De vuelta tenemos un festival de mujeres pateando traseros, sangre a borbotones, ambiente gótico y PVC a rolete. El detalle curioso es que, en su quinta entrega (y al mando de una mujer esta vez) Underworld: Guerras de Sangre se deja ver y es un poquito mas coherente que las últimos capítulos. No enoja al espectador pero tampoco le inyecta demasiado aire fresco a la franquicia como para que sobreviva mucho tiempo mas.

Considerando que medio mundo se ha olvidado de lo que ocurrió en la última Underworld, es sorprendente la sencillez con que la directora Anna Foerster nos pone en autos. Esta es una película de Underworld que se puede seguir, aún cuando pega un par de repingos en el aire que no son muy creíbles – manipulaciones políticas de algunos vampiros para quedarse con todo el poder aunque el barco se les esté hundiendo; romances de razas cruzadas que terminan con una traición; algunos superpoderes salidos de la galera que se vinculan a la abominación que era Scott Speedman en las entregas anteriores -. Hay mas cháchara pero quizás es de agradecer ya que permite establecer a los personajes, aún cuando sigan sin ser tridimensionales. Las performances son pasables y la acción es muy buena, especialmente cuando llega el final.

Obviamente para intentar mantener fresca la saga se precisan adiciones, y acá hay un par que resultan discutibles. La mas chirriante es la de una raza de vampiros misticos y pacifistas que viven en el norte de Inglaterra, todos de pelo blanco, individuos que han experimentado con la muerte y han regresado obteniendo algunos poderes extra. Ok, es interesante… hasta que le meten una onda tipo El Señor de los Anillos con una espada de plata forjada, un heredero perdido y una ridicula defensa del castillo contra un masivo ataque de lycans (que recién descubren esta fortaleza escondida). Ver a estos tipos exhibiendo escudos y espadas contra un ejército de flacos armados con Uzis es patético, aunque algunas peleas individuales (como Selene contra Marius) se dejan ver.

Para pasar el rato, Underworld: Guerras de Sangre se deja ver. Hay que agradecerle a la directora Foerster el conocer la bestia que maneja, armando un resumen didáctico y lanzándose a la acción sin mas tiempo que perder. Lara Pulver es una deliciosa adición a la franquicia y el resto está ok (la Beckinsale le sigue poniendo garra aunque esto sea de lo peorcito que haya agarrado en su carrera). No incentiva mi espíritu para una sexta parte, pero creo que hay franquicias que han llegado en peor estado a esa altura de su carrera (¿alguien dijo Resident Evil?). Por el momento es perdonable, siempre y cuando no tenga muchas pretensiones, y la agarre gratis en cable o en algún servicio de streaming.

INFRAMUNDO

Los filmes de la saga Underworld son: Inframundo (2003), Inframundo: Evolución (2006) e Inframundo 3: La Rebelión de los Lycans (2009); tres años más tarde la saga fue extendida con la idea de generar una nueva trilogía, comenzando con Inframundo: El Despertar (2012), Underworld: Guerras de Sangre (2016)