Crítica: Transformers (2007)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2007: Shia LeBoeuf (Sam Witwicky), Megan Fox (Mikaela Barnes), Josh Duhamel (Capitán Lennox), Rachael Taylor (Maggie Madsen), Jon Voight (secretario de la defensa John Keller), Kevin Dunn (Ron Witwicky), John Turturro (agente Simmons), Anthony Anderson (Glen Whitman), Tyrese Gibson (Sargento Epps), Michael O’Neill (Tom Banachek), Julie White (Judy Witwicky), Bernie Mac (Bobby Bolivia)

Director: Michael Bay, Guión: Alex Kurtzman & Robert Orci, basados en los juguetes creados por Hasbro y la serie homónima de dibujos animados, Musica – Steve Jablonsky

Trama: Guerras civiles han acabado con el planeta robótico Cyberthron. En la desaparición del planeta se ha perdido el cubo que contiene la Chispa Vital, la poderosa fuente de energía capaz de dar vida a las máquinas. Tras la pista de la Chispa Vital se encuentran los Decepticons, liderados por Megatron, y los opositores Autobots, liderados por Optimus Prime. Mientras que los Decepticons desean utilizar la fuente de poder para conquistar otros planetas, los Autobots desean reconstruir Cyberthron o, en su defecto, destruir la Chispa Vital para detener a Megatron. Pero Megatron y la Chispa se han estrellado en la Tierra, en el Polo Norte y permanecen congelados hasta que son encontrados a principios de siglo por el abuelo de Sam Witwicky. Fast Foward al tiempo presente: Optimus Prime llega a la Tierra para localizar a Sam Witwicky, el que posee la única pista del paradero de la Chispa Vital. Pero los Decepticons tienen la misma información y se lanzan a ubicar al cubo y a liberar a Megatron de la prisión criogénica en que lo mantiene – en secreto – el gobierno estadounidense durante todo este tiempo.

Transformers La empresa japonesa Takara creó en 1984 a los Diaclones. Esos juguetes después fueron adquiridos por la compañía norteamericana Hasbro, quien les cambió el nombre a Transformers y empezó a comercializarlos en el mercado yanqui. Los Transformers se volvieron un éxito y pronto tendrían su propia historieta y su serie de dibujos animados (1984 – 1987). Es un caso bastante parecido a He-Man y otros personajes, que surgieron como juguetes exitosos y terminaron por construirles una mitología y masificarlos a través de la TV.

Pero si He-Man es básicamente un Conan de segunda, bien sobre él se pueden tejer mitologías relativamente coherentes. No es el caso de los Transformers, que es el paroxismo de lo absurdo. Un juguete basado en un auto que se transforma en robot, no tiene historia posible. Como nunca falta algun desquiciado, empezaron a inventar toda la teoría de un mundo de robots que podían tomar la forma de cualquier máquina. No sólo físicamente es imposible que algo que pesa varias toneladas y tiene decenas de metros de altura se transforme en un simple Chevy Camaro, sino que tenga capacidad para albergar balas y misiles que no se terminan nunca. Es un concepto realmente idiota, que puede camuflarse en un dibujo orientado para chicos (que termina siendo un gigantesco comercial patrocinado por el fabricante).

Pero los Transformers fueron populares en su momento y ahora, en plena euforia de los CGI y de la escasez de ideas, llega la versión para la pantalla grande de la mano de Michael Bay. Bay para esta altura venía en picada – su último film, La Isla, fue un horrendo fracaso -y simplemente eligió al proyecto delos Transformers no por una cuestión de gustos artísticos sino simplemente porque sabía que iba a ser un hit que le diera aire a su carrera. Lo que se dice un mercenario.

Es indudable que como director Michael Bay da asco. Si bien por un lado sabe mantener las cosas en movimiento – es raro aburrirse en un filme de Bay -, cuando llega el momento de la acción maneja la cámara de un modo frenético que dan ganas de vomitar. Es como ver un film mientras está en la montaña rusa. Además el otro problema de Bay es que al tipo sólo le importa sacudir la cámara y no filtra el guión, con lo cual toma los libretos tal cual están y muchas veces los protagonistas tienen algunas de las líneas más atroces de la historia.

Lo increíble es que con una historia tan idiota como Transformers, Bay se las arregla para sacar lo que debe ser el mejor filme de su carrera. La exposición de la historia está dosificada de un modo que no atiborra, y resulta dentro de todo bastante coherente… por lo menos hasta que empiezan a hablar del planeta Cyberthron. Por suerte esos momentos duran poco, y uno puede seguir con la película sin sentirse agredido mentalmente.

Transformers funciona principalmente por dos elementos, que son Shia LeBoeuf y las escenas de acción. LeBouef es realmente un gran intérprete, y hace muy llevadero al relato. Sus momentos de comedia son buenos, y si bien no es un gran personaje, al menos es carismático. Al momento de llegar a la acción, es realmente espectacular y disfrutable, pero están todos los defectos de Bay elevados a la enésima potencia. La mitad de las numerosas secuencias de acción uno se encuentra maldiciendo por el Parkinson que padece la cámara, que no permite ver con claridad lo que pasa. Para ver escenas con cámara movida, Bay debería aprender de la serie de TV Galactica, que maneja el mismo enfoque seudo documentla (cámara movida en mano) pero de mucha mejor forma.

Es una película muy entretenida. Es obvio que el cerebro hay que ponerlo en off y no pensar en la lógica del relato (si es que la hay). Hay personajes abominables como el agente que interpreta John Turturro, pero no van tan mal con el tono del film, que no se toma muy en serio a sí mismo. En otras ocasiones se ven cosas anacrónicas (algunos de los Autobots se portan y hablan como raperos) pero ningún sacrilegio dura más que unos segundos. Dentro de todo, es una película más que potable si perdona los errores e incoherencias.

TRANSFORMERS

Las versiones para la pantalla grande de la serie de TV Transformers son: Transformers (2007); Transformers: La Venganza de los Caídos (2009); Transformers: El Lado Oscuro de la Luna (2011). La saga sería reiniciada / secuelizada con Transformers: La Era de la Extinción (2014) y Transformers: El Ultimo Caballero (2017). Bumblebee (2018) es una precuela de la saga.