Crítica: El Retorno del Conde Yorga (1971)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 1971: Robert Quarry (conde Yorga), Mariette Hartley (Cynthia Nelson), Roger Perry (Dr David Baldwin), Yvonne Wilder (Jennifer), Rudy De Luca (teniente Madden), Philip Frame (Tommy), Tom Toner (reverendo Thomas), George Macready (profesor Rightstat)

Director: Robert Kelljan, Guión: Robert Kelljan & Yvonne Wilder

Trama: En una fiesta de disfraces organizada en un orfanato se presenta el conde Yorga, el que se enamora inmediatamente de la bella Cynthia Nelson, maestra del lugar. Horas más tarde Yorga envía a su legión de vampiros a asesinar a la familia de Cynthia y rapta a la chica, a la cual mantiene hipnotizada en su mansión. Jennifer, la mucama muda del orfanato, es testigo de la matanza y acude a la policía; pero al llegar con las fuerzas del orden, los cadáveres y rastros de violencia han desaparecido, y muy pronto empiezan a pensar que se trata de la imaginación de la chica. Sin embargo el Dr. David Baldwin no ha quedado muy convencido con las explicaciones y comienza a investigar, hasta descubrir el secreto de Yorga. Y ahora deberá encarar la misión suicida de rescatar a Cynthia de las garras del milenario vampiro.

El Retorno del Conde Yorga Esta es la secuela del hit Conde Yorga, Vampiro (1970), y que le diera sus quince minutos de fama a Robert Quarry, siendo el gran candidato a suceder a Vincent Price en el trono de icono del terror de los estudios AIP. Lamentablemente las cosas no cuajarían para Quarry, ya que justo sobrevendría el divorcio comercial de los dueños de la American International Pictures, Samuel Z. Arkoff y James H. Nicholson, y lo remanente del estudio terminaría por decantarse hacia productos blaxpoitation durante el resto de la década en vez de continuar con su tradicional línea de horror.

En realidad, más que una secuela, El Retorno del Conde Yorga es una reimaginación algo bizarra de la pelicula original. Quarry aparece lo más campante por allí, al igual que su sirviente deforme y su legión de vampiras, las cuales habían sido exterminados en el primer filme; Roger Perry regresa como destructor de vampiros, pero en un personaje completamente diferente; y no hay ninguna explicación sobre si esto es una secuela o precuela (lo cual podría caber perfectamente). Incluso la historia mantiene la misma estructura, con Perry culminando por internarse – él solito – en la mansión del vampiro para rescatar a la bella de turno.

El Retorno del Conde Yorga es un muy buen filme si uno no ha visto el original. Caso contrario, verá que hay un montón de trucos y circunstancias demasiado parecidos, aunque igual tenga sus momentos. Lo que uno extraña respecto del original es que ahora la trama tiene menos humor autorreferencial, aunque Quarry se reserve un par de joyitas imperdibles, como hacer chistes sobre un tipo disfrazado de Dracula en la fiesta en el orfanato, o que mate el tiempo viendo The Vampire Lovers (1970, con Ingrid Pitt) en la TV y doblada en castellano (wtf!). Tampoco tiene el grado de shock del original, en donde la chica se devoraba al gato en su cocina, aunque el ataque inicial de la legión de vampiras esté muy bien hecho, y el climax en la mansión – con la insípida Mariette Hartley siendo acosada por los susurros de las vampiras – tenga sus momentos.

Es una lástima que no hayan rodado más peliculas del conde Yorga, ya que valían la pena. El director Robert Kelljan haría otra entrada más en el género (Scream Blacula Scream en 1973), antes de desaparecer en la televisión dirigiendo toneladas de capítulos de series.

CONDE YORGA, VAMPIRO

Las películas sobre el conde Yorga son: Conde Yorga, Vampiro (1970), y El Retorno del Conde Yorga (1971)