Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco
USA, 2016: Kate Siegel (Maddie Young), John Gallagher Jr. (acosador), Samantha Sloyan (Sarah Green), Michael Trucco (John Stanley), Emma Graves (Max Young)
Director: Mike Flanagan, Guión: Mike Flanagan & Kate Siegel
Trama: Maddie Young es una escritora de éxito. Luego de una crisis romántica ha decidido retirarse a una cabaña en el bosque, en donde ha comenzado a escribir su segunda novela. Maddie es sordomuda desde los 13 años, razón por la cual los distantes vecinos de la cabaña la visitan con asiduidad para brindarle un rato de companía y algo de ayuda en sus tareas diarias. Pero ahora ha llegado al lugar un sicópata, el cual se complace en liquidar a sus víctimas de manera lenta y dolorosa. El asesino ha destazado a la vecina de Maddie y ahora viene por la escritora; pero al descubrir que es sordomuda, ha decidido jugar al gato y al ratón, encerándola en la casa y asediando a la chica durante toda la noche. Sin embargo Maddie es mucho mas inteligente que el resto de sus víctimas y, en la desesperación, le ha planteado un reto formidable al criminal, llegando a un punto en que el asesino ha decidido poner fin al asedio e irrumpir en la casa para destrozar a la escritora. Pero el miedo es una fuerza tan desconocida como poderosa, y pronto Maddie se descubrirá librando una batalla cuerpo a cuerpo con el asesino, un duelo brutal en donde el único resultado posible es la muerte de uno de los combatientes.
un asesino serial espía tus emails (literalmente) en Silencio (Hush) (2016)
Hush es un filme de Mike Flanagan, el mismo de Oculus. Acá elabora una premisa interesante con Kate Siegel – su esposa y también protagonista de la película; mujer fea si las hay -, la cual trata del asedio de un asesino serial a una sordomuda encerrada en su cabaña en medio del bosque. Ya Hollywood había tratado el tema – discapacitados vs sicópatas – en filmes anteriores como Espera la Oscuridad (1967) con Audrey Hepburn o See No Evil (1971) con Mia Farrow, tan sólo por citar un par de ejemplos – hay otros mas en la filmografía italiana, especialmente durante el auge del giallo -. Mientras que lo usual es poner a una víctima ciega librando una batalla desigual contra el desquiciado de turno, aquí la novedad es que la protagonista es sordomuda, lo cual es mas angustiante ya que son muy limitados los medios que dispone para comunicarse con el mundo (y pedir ayuda) – sea mensaje de texto o vía chat en Internet, mecanismos que el malvado de la película se encarga de anular rápidamente al principio del filme -. Por otra parte el escenario es el de un sitio – el demente rodea la casa y la amenaza desde todos los ángulos -, con lo cual la sordomuda debe adivinar si el asesino ha penetrado las defensas de la casa, o si éste se encuentra a sus espaldas y a punto de rebanarle el cuello.
Ciertamente la premisa es idiota desde el momento en que el sicópata puede romper un vidrio de cualquier puerta / ventana cuando se le plazca, y liquidar a Kate Siegel en dos segundos con un disparo de su ballesta; pero al ensalsarlo con la idea del empoderamiento – el tipo puede jugar con el terror de su victima durante horas, total, la considera tan indefensa (por ser sordomuda) que su muerte es una cuestión inevitable -, la idea de la demora en la ejecución toma cierta lógica, aún cuando haya momentos en que la Siegel logre patearle el trasero al asesino un par de veces. Es el sabor de la pelea, lo que hace relamer al sicópata para retrasar el premio que supone destrozar a su aguerrida víctima.
Si uno se olvida del tema del vidrio / la posible irrupción del asesino en la casa en el momento que se le cante, Hush es una muy buena película. Kate Siegel no es John McClane pero sí es una víctima inventiva que crea distracciones para intentar escapar o, al menos, obtener elementos para su defensa. Y mientras el horror de la chica sigue, la llegada de un vecino al lugar condimenta mucho las cosas, en una escena rodada con enorme suspenso. Eso sin contar con la formidable secuencia en que la Siegel comienza a limpiar la cocina y no escucha como su amiga le pide ayuda a los gritos mientras es masacrada contra su puerta por el asesino.
Hush es una película chiquita muy sólida y muy bien llevada. La batalla final está filmada con tensión, y es el fruto de dos personas cansadas y llevadas al limite de la desesperación, las cuales quieren terminar con esto de una buena vez. Una de las mejores cosas del filme es la lógica de las acciones de la Siegel y del asesino, las cuales rezuman inteligencia. Es bueno ver un filme de terror hecho con dos dedos de frente y que, por sobre todo, sabe mantener la tensión desde el principio al fin de manera casi impecable.