Crítica: Hellraiser: Revelations (2011)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2011: Steven Brand (Dr. Ross Craven), Sebastien Roberts (Peter Bradley), Nick Eversman (Steven Craven), Daniel Buran (Vagrant), Stephan Smith Collins (Pinhead), Jay Gillespie (Nico Bradley)

Director: Victor Garcia, Guión: Gary J. Tunnicliffe, basado en los personajes creados por Clive Barker

Trama: Nico Bradley decide irse de parranda a Mexico, y lo hace en compañía del hermano de su novia, Steven Craven. Luego de noches de mucho sexo y alcohol son contactados por un vagabundo, el que les promete llevarlos a la experiencia extrema de los sentidos, y les entrega una enigmática caja. Ahora nos situamos en la casa de los Craven. Hace semanas que los chicos han desaparecido y ya se los da por muertos. Sin embargo la hermana de Steven ha logrado dar con la cámara de video que llevaban en el viaje, la cual documenta que los muchachos habian logrado abrir la caja y que ésta habia activado la presencia de algo sobrenatural. Dispuesta a todo para recuperar a su hermano, decide desbloquear el artefacto, el cual sume a la casa en una especie de limbo entre la Tierra y otra dimensión. Y, mientras los Craven intentan descifrar lo que ha ocurrido Steven reaparece, seriamente herido. Ahora los Craven se encuentran desesperados por intentar revertir la situación y poder llevar a su hijo a un hospital… mientras extrañas criaturas de aspecto demoníaco han comenzado a asediar la casa.

Hellraiser: Revelations En 1987 Clive Barker se anotó un poroto con Hellraiser, un filme de terror que mezclaba fantasias lovecraftianas – con seres demoníacos que vivian en otras dimensiones paralelas a la nuestra, y que esperaban la oportunidad para abalanzarse sobre nuestro mundo – con toda una imagineria sado masoquista extrema. El filme es un clásico y disparó la carrera cinematográfica de Barker por un instante, antes de fracasar estrepitosamente con su siguiente película, Razas de Noche (1990).

Como es de esperar, cuando se da un éxito inmediatamente se suceden las secuelas, y las mismas se reproducen de manera enfermiza, superando la capacidad de potabilidad que puede tener una idea estirada hasta el hartazgo. A veces ocurre que esas franquicias cambian de mano y los nuevos compradores se encuentran decididos a todo con tal de recuperar costos. Es por eso que las sagas se degeneran en productos cada vez mas malos y baratos, y los numerales de dos dígitos comienzan a aparecer al lado del nombre del filme. En el caso que nos ocupa, ésta es la novena película de la serie. Y un dato no menor es que la figura central de este circo – Doug Bradley, quien encarnó al villano Pinhead desde el origen – se encuentra ausente sin aviso. Lo sustituye otro calvo, peor actor y de presencia mucho menos intimidante.

Durante los primeros minutos da la impresión que Hellraiser: Revelations va a seguir la moda de los filmes en primera persona – tipo El Proyecto Blair Witch o Actividad Paranormal – que tanto rédito viene dando en taquilla, y en donde hay un idiota rodando todo el tiempo, pase lo que pase en escena. Si la película hubiera seguido con ese estilo todo el tiempo, quizás el resultado final hubiera sido mejor. Hay dos muchachos que se van a vivir la vida loca a México, prueban de todo y llegan a acceder a la cajita dichosa que todos conocemos y que sirve para abrir los portales dimensionales que liberan a los chicos malos de turno. Luego viene un corte, fast forward, y nos encontramos en una cena familiar. Los chicos desaparecieron, pero la familia de uno de ellos aún tiene la caja misteriosa y la cámara de video con la filmación (¿cómo diablos llegó todo eso a su poder?). Algún cráneo decide activar la cajita feliz y la casa entra en un limbo dimensional, en donde desaparecen los coches y los teléfonos no funcionan (porque eso es lo que pasa cuando saltás a otra dimensión, ¿no?). Lo que sigue es una horda de personajes estúpidos haciendo preguntas estúpidas, llorando y gritando por los rincones. Uno de los chicos reaparece, nadie se pregunta cómo hizo este flaco – débil y malherido – para venirse caminando desde México, y pronto se revela que nada es lo que parece. El portal está abierto, y Pinhead y sus huestes están esperando el momento para irrumpir en la casa… en donde hay alguien que desea llamarlos para hacerle una propuesta inquietante.

La figura más conocida del cast es Steven Brand, el que hacía de villano en El Rey Escorpión y que, comparado con el resto del elenco, parece tener la estatura actoral de Sir Ian McKellen; pero en general todo el mundo actúa de manera mediocre y disparan sus líneas sin demasiada convicción. Todo en el filme se ve amateur y flojo, como si fuera un show montado por incompetentes. Ciertamente hay algunas ideas interesantes – el tema de la familia atrapada en la casa me hace acordar a El Angel Exterminador de Luis Buñuel; el enfoque de la cámara en primera persona está bastante bien pero se usa demasiado poco – pero da la impresión de que se trataba una historia pasable que cayó en manos de un guionista mediocre y que terminó siendo montada en cámara por un director mediocre. El nuevo Pinhead se ve vulgar, un impostor del original que carece de presencia; no hay un solo susto y, cuando la historia se aproxima al final, se vuelve cada vez más ridícula. El final se desploma por lo absurdo que es.

En vista de ello uno puede afirmar – sin cargo de conciencia – que Hellraiser: Revelations es el clavo final en el ataúd que se ha construído a sí mismo la saga debido a su bajísima calidad. Hace rato largo que deberían haber jubilado a Pinhead y a sus huestes, o al menos deberian haberse tomado la molestia de contratar a alguien con talento para revitalizar la franquicia. Pero, mientras existan amorales generando este tipo de engendros – con presupuesto y talento cero -, las secuelas seguirán inundando los estantes de los videoclubes, insultando la memoria de los filmes originales que le dieron vida y que no merecían semejante tratamiento.

HELLRAISER

Algunos de los filmes de la saga, comentados en este portal: Hellraiser (1987) – Hellraiser: Revelations (2011)