Crítica: Gone in 60 Seconds (2000)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2000: Nicolas Cage (Memphis Raines), Giovanni Ribisi (Kip Raines), Will Patton (Atley Jackson), Delroy Lindo (detective Roland Castlebeck), Timothy Olyphant (detective Drycoff), Robert Duvall (Otto Halliwell), Christopher Eccleston (Raymond Calitri), Angelina Jolie (Sara ‘Sway’ Wayland)

Director: Dominic Sena, Guión: Scott Rosenberg, basado en el filme de 1974 escrito por H.B. Halicki

Trama: La falta de criterio de Kip Raines lo ha metido en serios problemas con su jefe Raymond Calitri. Es que Raines es ladrón de autos de alta gama y, en un exceso, ha llamado la atención de la policía llevándolos hasta la madriguera en donde guardaban cerca de 20 costosos coches robados. Calitri ha montado en furia – necesita tener un embarque de 50 coches preparados para el lunes – y por ello le ha dado a Kip un ultimátum: o consigue todos los coches para el fin de semana, o su cuerpo aparecerá flotando en el río. Es por ello que Kip le solicita ayuda a Memphis, su hermano y quien fuera un formidable ladrón de autos. Memphis decide salir de su retiro para salvar el pellejo de Kip y para ello forma un equipo de expertos ladrones dispuestos a llevar adelante la misión de obtener 50 coches en una sola noche; pero el detective Castlebeck ha olfateado la movida y está dispuesto a atrapar a los Raines y sus asociados en una masiva operación policial durante la noche del robo. ¿Podrán los Raines salirse con la suya y pagar la deuda mortal que tienen con el despiadado Calitri?.

Angelina Jolie y Nicolas Cage se corren todo en la remake 2000 del clásico de culto Gone in 60 Seconds Angelina Jolie y Nicolas Cage se corren todo en la remake 2000 del clásico de culto Gone in 60 Seconds

60 Segundos (2000) En 1974 un vendedor de autos montó un filme independiente – basado en una simple excusa como para mantener una lárguisima y excitante persecución automovilística protagonizada por él mismo – y recaudó una ponchada de millones. El filme devino en título de culto, y fue admirado por los conocedores de la industria – acróbatas, directores, creativos -, quienes tomaron ideas del mismo para los blockbusters que siguieron. Lástima que su creador falleciera en un accidente durante el rodaje de la secuela en 1989. 26 años mas tarde su viuda vendió los derechos a la Disney, y el estudio generó esta suerte de remake, entretenida aunque algo tibia y sin la garra del filme original.

No es muy dificil superar a Gone in 60 Seconds 1974 al menos en términos técnicos. Hay mas dinero, mejor producción, mejores actores, un libreto mas pulido y coherente. Pero el filme de H.B. Halicki triunfaba en el apartado adrenalina, ya que el tipo corría como un endemoniado y sin demasiados dispositivos de seguridad – en uno de los saltos que el tipo acomete con su Mustang, Halicki se fusionó varias vertebras por el golpe y tuvo que estar semanas en el hospital, forzando la suspensión del rodaje -. Acá hay una mezcla de stunts y trucaje, y la persecución final es muchisimo mas breve que el original, aunque tiene su cuota de novedades interesantes – como es el gigantesco tanque a gas, que se cae de un camión, se rompe y se dispara en medio de la persecución como un misil sin dirección fija -.

En si, Gone in 60 Seconds 2000 es un entretenimiento sólido y pasable pero difícilmente memorable. Nick Cage destila simpatía, Giovanni Ribisi es rematadamente idiota, Christopher Eccleston exhibe otra de sus horrendas sobreactuaciones (¿cómo es que le dan tanta cabida en la industria a un actor tan malo?), Will Patton sigue siendo confidente (hubiera sido un mejor villano que Eccleston toda la vida), y la gracia es Delroy Lindo, sagaz y cínico como él solo sabe hacer. El filme pierde demasiado tiempo en la burocracia del armado del robo (es un robo de coches, no el asalto a la bóveda del hotel Bellagio) y en cuestiones familiares y, cuando llega el desenlace, la solución mágica de los últimos cinco minutos (por parte de Delroy Lindo) carece de sentido. (alerta spoilers) En serio: ¿cómo van a disfrazar el hecho de que nadie robó 50 coches simplemente porque a Lindo le salvaron la vida? (fin spoilers)

Gone in 60 Seconds 2000 es una película diferente a la de 1974. Ok, hay algunas referencias – el Mustang Shelby 67 “Eleanor”, una foto de Halicki, la idea del robo masivo, la secuencia del auto robado que pertenecia a la mafia y tiene una ponchada de droga en el baúl -, pero está armado de manera distinta y, al estilizarlo y hacerlo mas mainstream, le han quitado el picante del original. Mi consejo es que vea primero la de Nick Cage y después tome el original de Halicki como aperitivo, deleitándose con un show de muscle cars desatados en medio de la ciudad y dejando un tendal de patrulleros destrozados, un festín que le daría un orgasmo de placer al mismísimo Hal Needham.

GONE IN 60 SECONDS

Gone in 60 Seconds (1974) es el original de H.B. Halicki – Gone in Sixty Seconds (2000) es la remake