Crítica: Cargo (2009)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

Suiza, 2009: Anna-Katharina Schwabroh (Laura Portmann), Martin Rapold (Samuel Decker), Regula Grauwiller (Anna Lindbergh), Yangzom Brauen (Miyuki Yoshida), Pierre Semmler (Pierre Lacroix), Claude-Oliver Rudolph (Igor Prokoff), Michael Finger (Claudio Vespucci)

Director: Ivan Engler & Ralph Etter, Guión: Arnold Bucher, Ivan Engler & Patrik Steinmann

Trama: La Tierra. en el futuro, estará tan polucionada que la humanidad deberá emigrar a nuevos planetas. El primero de ellos es Rhea, el que se presenta como un nuevo paraíso; pero el acceso a él está restringido a unos pocos adinerados. Laura Portmann ha estado acumulando dinero para ir a Rhea y reunirse con su hermana, pero para ello debe realizar un último viaje como doctora de a bordo en el crucero Kassandra, el que lleva materiales de construcción a la estación orbital 42. El viaje dura 4 años y los tripulantes toman turnos de 8 meses cada uno. Pero en el turno de Laura ha descubierto que hay algo vivo, deslizándose por los compartimientos de carga. Por ello ha despertado al capitán y al oficial policial de a bordo, los que se dedican a investigar el suceso. Pero con la muerte del capitán en un dudoso incidente, muy pronto toda la tripulación del Kassandra terminará de ponerse en alerta y comenzarán a rastrear toda la nave para descubrir al ser que está provocando los desastres en la bodega.

Cargo Cargo tiene el mérito de ser la primera película de la incipiente cinematografía suiza. Tiene algunos detalles de terminación exóticos, como el hecho de que el filme esté hablado enteramente en alemán, las pantallas de las computadoras estén en japonés, y los carteles de advertencia están en inglés. Si no fuera por el fuerte acento germánico del cocoliche hablado en el filme, bien podría pasar como una producción serie B norteamericana: no hay actores conocidos, hay impecables efectos especiales, y excelentes decorados. En sí, no hay nada demasiado original en toda la historia del filme, pero está hecha con una dignidad y prolijidad que asusta. Las performances son buenas, el clima es notable, y los personajes son inteligentes. Ojalá los suizos hagan más filmes como éste.

El tema es que Cargo se siente como Pandorum encuentra a Matrix. Ese es el mayor problema del filme, que no termina de despegarse nunca de la sombra de otros filmes más conocidos y, lo que es peor, el 90% de los espectadores tienen fresco el recuerdo de ellos. Acá hay otra tripulación sumergida en sueño criogénico, un oficial despierto, acontecimientos fuera de lo usual, una llamada de alerta general para despertar al resto de los miembros, y la consabida rutina del asesinato de los tripulantes uno a uno mientras la protagonista intenta descifrar el misterio de turno. Como los efectos especiales son fabulosos – esta gente se ha gastado su buen dinero, y lo más curioso es que la cantidad de casas de efectos especiales involucra firmas en la India, por ejemplo -, y la dupla de directores es prolija y coherente, el clima termina por enganchar a la platea, y Cargo se convierte en rutina bien hecha. Incluso Ivan Engler y Ralph Etter toman prestados recursos estilísticos del Sunshine, Alerta Solar de Danny Boyle: acá todo se ve gigantesco y amenazador, y los diminutos humanos se pierden en la inmensidad de semejantes escenarios espaciales. Todo ello contribuye a generar una enorme sensación de soledad que ayuda a la efectividad del filme.

Si el final es coherente o no con la premisa de la historia es otro tema, y al menos Cargo lo resuelve bastante bien. Hay unas cuantas situaciones artificiales involucradas en medio del largo climax, que están para estirarlo y generar tensión, y que son discutibles pero no odiables. (alerta spoilers) Es cierto que todo el tema de la realidad virtual daba para otro clon de Matrix, y que uno se pregunta por qué montaron algo tan gigantesco y tan lejos; cómo no dejaron ni un tipo a cargo, o cómo dan de comer a esa población que vive en estado criogénico … pero la solución buscada en el filme es perdonable. A veces uno queda tan satisfecho con el desarrollo previo de una película que, cuando llega el momento de forzar la credibilidad, termina por aceptar cualquier cosa. (fin spoilers).

Cargo es recomendable. Es un buen thriller en el espacio, prolijito y con suspenso. No ganará ningún premio a la originalidad pero está bien hecho, y eso ya es decir demasiado.