Crítica: Una Aventura en el Espacio y el Tiempo: La Historia de Doctor Who (2013)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

Recomendación del EditorGB, 2013: David Bradley (William Hartnell), Jessica Raine (Verity Lambert), Brian Cox (Sydney Newman), Sacha Dhawan (Waris Hussein), Lesley Manville (Heather Hartnell)

Director: Terry McDonough, Guión: Mark Gatiss

Trama: Inglaterra, 1963. El director de programación de la BBC, Sydney Newman, se encuentra desesperado porque sus shows no atrae al público más deseado – niños y adolescentes -. Decidido a impulsar un proyecto temerario, decide encargarle a su asistente Verity Lambert la producción de un programa de ciencia ficción, basada en una idea tan diferente como revolucionaria. Para ello asciende a Lambert al puesto de productora ejecutiva – algo único para su época -, y la chica pronto descubre que deberá lidiar tanto con la discriminación de sus pares masculinos como con las brutales limitaciones presupuestarias que le impone la emisora. Así es como entre Lambert y Newman terminan creando una tira llamada “Doctor Who”, basada en las aventuras protagonizadas por un científico alienígena y su familia a lo largo de todo el universo y de todas las épocas. Y aunque el show estaba pensado como un espectáculo didáctico orientado a los más pequeños, no es sino hasta su segunda emisión – con la aparición de la despiadada raza alienígena de los Daleks – que el programa se convierte en un fenómeno inmensamente popular; pero pronto los productores se topan con un problema casi insalvable y es que su intérprete principal – el veterano actor de carácter William Hartnell – está afectado seriamente por la arterioesclerosis, razón por la cual sus performances se vuelven cada vez más inestables. Y ahora deberán decidir cómo manejar la continuidad de un show adorado por millones… los cuales ven a Hartnell como su único e irreemplazable protagonista.

Una Aventura en el Espacio y el Tiempo: la Historia de Doctor Who Una Aventura en el Espacio y el Tiempo es el telefilme homenaje que narra el nacimiento de la mítica serie británica Doctor Who. Por si alguno de nuestros lectores proviene de una galaxia ajena a la Vía Láctea, le informaremos que Doctor Who es una tira pionera en el campo de la ciencia ficción televisiva, la cual ha estado emitiéndose casi sin interrupciones desde 1963 hasta la fecha. Si los yanquis han adorado con fruición a Star Trek y sus numerosas secuelas, los británicos han construído su propio altar en torno al buen doctor y toda la mitología que lo rodea.

Tengo que admitir que no soy un fan de Doctor Who, simplemente porque no he tenido tiempo de ver alguna de las encarnaciones de la serie – aunque he soportado esos engendros protagonizados por Peter Cushing en los 60s, los cuales han sido abucheados ampliamente por los seguidores históricos de la tira -. Siendo ése el caso, me limitaré a hacer una regurgitación informativa de la Wikipedia y otras fuentes válidas de información, como para ilustrar la importancia de Doctor Who en el contexto histórico en que nació, y cómo logró convertirse en un fenómeno de culto que se mantiene vivo 50 años después de su primera emisión.

Ciertamente todo tiene que ver con la idiosincracia de los pueblos. Mientras que los norteamericanos han sido más propensos de ver a la ciencia ficción como un mecanismo de aventuras y/o un medio para crear utopías – he allí el origen de los superhéroes, de los temerarios espaciales al estilo de Flash Gordon, y de los cuentos de la revista pulp Amazing Stories, verdadero semillero de escritores del género fantástico -, los británicos lo han visto como un catalizador para interpretar su propia historia y el mundo que los rodea. La ciencia ficción británica siempre fue más densa y cerebral – en donde los héroes no son intrépidos musculosos sino avispados científicos, ya sea el mismo Doctor Who o el profesor Quatermass -, y siempre estuvo propensa a la alegoría, lo cual abarca desde las obras de H.G Wells (como la despiadada sátira encubierta a la soberbia inglesa que supuso el texto original de La Guerra de los Mundos), pasando por el 1984 de George Orwell, hasta los comics de Dan Dare y Judge Dredd. En ese contexto Doctor Who se ve como el hijo natural de una larga tradición de textos e historietas de fantasía, cercano a los gustos nacionales, y propenso a convertirse en un intérprete moderno de la reciente historia inglesa. Y si bien el doctor nació con un propósito eminentemente didáctico, todas sus honorables intenciones terminaron en el tacho de la basura cuando emitieron el segundo capítulo – en donde aparecen los villanos favoritos de la serie, los Daleks -, el cual era mucho más adulto y cerebral… algo que apasionó al público y le dió un rating de diez millones de espectadores al terminar la transmisión. ¿Y por qué tuvo semejante éxito?. Simplemente porque los Daleks eran una raza despiadada de invasores, los cuales vacíaban los recursos naturales de los planetas que se apoderaban, y asesinaban a todos aquellos que eran diferentes a ellos. Resulta obvio que los Daleks venían a ser la versión alienígena de los nazis, cuyo recuerdo aún estaba muy fresco para la sociedad inglesa allá en el 1963 en que tuvo lugar la transmisión del capítulo, y cuyas resonancias emocionales hicieron que el público viera con otros ojos a la serie. Gracias a ese impulso – que se prolongó a lo largo de la década y generó toda una dalekmaníaDoctor Who se hizo merecedora del reconocimiento y respeto de la crítica, y pasó a convertirse en un fenómeno popular que dura hasta nuestros días.

Una Aventura en el Espacio y el Tiempo es el afectuoso docudrama que sirve para recrear los primeros tiempos de Doctor Who. Por supuesto está la mirada histórica – la necesidad de cubrir el bache de programación; el ascenso al rol de productora de Verity Lambert, la cual era la primer mujer ejecutiva de la televisión británica; el enrolamiento del estoico actor de carácter William Hartnell como el primer doctor; la desastrosa primera versión del programa; y la resucitación del show gracias al script de Terry Nation que presentaba a los Daleks en sociedad -, y la abundancia de cameos de protagonistas históricos de la tira, como William Russell o incluso el último doctor Matt Smith; y también está el drama pleno de resonancias emocionantes, como el triunfo del show en el momento en que estaba a punto de ser cancelado, o la triste decadencia de su protagonista, el cual debe lidiar con una avanzada arterioesclerosis en el momento cumbre de su carrera artística. Si bien todos los puntos están tratados con excelencia y respeto, creo que por lejos la mejor línea argumental es la relacionada con el protagonista William Hartnell, un veterano amargo y antisocial que pronto demuestra un costado sensible debajo de su dura caparazón. Es una performance de gran altura dramática dada por David Bradley – el celador de la saga Harry Potter, quien aquí da la actuación de su carrera -. El final es tan triste como emocionante, aún para un neófito de la saga como soy yo… así que me imagino que para los fans debe resultar tan formidable como memorable.

Aún sin conocer la saga, Una Aventura en el Espacio y el Tiempo es un excelente drama de época que narra los comienzos de un show legendario en una época en donde la televisión era aún un asunto artesanal. No se precisa saber sobre Daleks, Cybermens, científicos alienígenas, o razas invasoras del espacio para disfrutar el filme en toda su dimensión; en todo caso tiene un mix de ciencia ficción vintage, épica histórica y drama personal que resulta eficiente y emocionante, simplemente porque está manejado con tacto e inteligencia. Sin dudas es un punto válido de inicio para empezar a acercarse a la serie; y para aquellos que son fans de toda la vida, les parecerá una carta de amor hecha de puño y letra por un amante de la saga. En todos los casos Una Aventura en el Espacio y el Tiempo es un filme delicioso y recomendable, que tiene todos los quilates propios de un espectáculo inteligente hecho con mucho, mucho afecto.

DOCTOR WHO

Los filmes de Doctor Who comentados en este portal son: Dr. Who y los Daleks (1965) – Daleks Invasion Earth 2150 A.D. (1966). También hemos reseñado Una Aventura en el Espacio y el Tiempo (2013), un docudrama que recrea el proceso de creación de la serie y la elección del primer protagonista.