Crítica: Tomb Raider: Ascension (2008)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

GB, 2008: Anna Tyrie (Lara Croft), Philip Goldacre (lord Richard Croft), Peter Wear (lord Errol Croft), Jamie Duncombe (Jax), Ava Hunt (Amelia Croft), Hugh Hemmings (Winston)

Director: Stephen Reynolds, Guión: Stephen Reynolds, basado en el videogame homónimo creado por Eidos.

Trama: Cuando era adolescente, Lara Croft perdió a su madre en un accidente aéreo sobre la cordillera del Himalaya. La joven también viajaba en el avión y logró sobrevivir por sus propios medios durante dos semanas hasta que los rescatistas la encontraron; pero la muchacha sufrió un shock y y desde entonces ha perdido la noción del miedo. Ahora Lara se encuentra en sus treinta años, y su padre – el prestigioso arqueólogo Richard Croft – ha desaparecido. Después de tres años de búsqueda sin noticias, Lord Errol Croft – hermano de Richard – ha decidido declarar su muerte y realizar un funeral en ausencia. Pero Lara está convencida de que su padre está vivo, y que las pistas para encontrarlo se encuentran en el pasado. Y todo parece indicar que Richard Croft se extravió en la búsqueda de un talismán maya que posee el secreto sobre un cataclismo universal que ocurrirá en el año 2012, cuando el sistema solar atraviese el ecuador de la Vía Láctea. El tema es que otro grupo de buscadores se encuentran tras el talismán, y sus intenciones son claramente hostiles.

Tomb Raider: Ascension Ya hemos hablado en otras oportunidades acerca de Tomb Raider. Es una saga de videojuegos creada en 1996 por la firma Eidos que intentaba trasladar la emoción de las aventuras al estilo de Indiana Jones, sólo que esta vez con una intérprete femenina. El gran éxito del juego se debió no tanto a los puzzles y aventuras sino a que Lara Croft resultó ser una protagonista que destilaba carisma y actitud. De hecho el personaje terminó por transformarse en un ícono cultural que sobrepasó los límites del mercado de los videogames. Desde modelos tipo Playboy posando con las ropas de Lara hasta comerciales de los más diversos productos (no sólo videojuegos) protagonizados por el personaje. Hollywood trasladó sus aventuras en dos ocasiones: la aceptable Lara Croft: Tomb Raider (2001) y el bodriazo enorme que fue Tomb Raider: La Cuna de la Vida (2003). Incluso los estudios están evaluando un reboot de la franquicia, esta vez sin Angeline Jolie en calzas y con pistolas.

Y entre todo ese maremagnum de cosas, aparece de la nada Tomb Raider: Ascension. A primera vista parece un proyecto para cable de Eidos, hasta que uno se entera que es un fan film (una película amateur rodada por fanáticos). Es casi imposible obtener datos sobre el filme, exceptuando de que en el cast hay varios secundarios británicos de cierta trayectoria como Hugh Hemmings y Phillip Goldacre, que se rodó en una semana y que costó 10.000 libras.

Usualmente los fan films no dejan de ser películas entusiastas con algo de estilo y cero de substancia. Lo habitual es que los fans encarnen a sus héroes, elaboren sofisticados trajes y se exhiban en pura pose, lo que nos da un rato de excitación a los espectadores y una enorme satisfacción a los involucrados en el corto – el caso típico es la excelente Batman: Dead End de Sandy Collora -. Pero poquísimos son los casos en que un fan film demuestran interés en desarrollar personajes y tramas, y que los mismos sean interesantes para el público en general – la excepción es la brillante película finlandesa Star Wreck: In The Pirkinning -. Es decir, algo que quede a mitad de camino entre lo profesional y lo amateur. Tomb Raider: Ascension es una película cuidada, que demuestra un respeto reverencial por el personaje, pero no es tan pulida ni inspirada como Star Wreck.

El primer contacto con el filme no es muy bueno. Cuando aparece Anna Tyrie en pantalla, uno se pregunta de dónde salió esta impostora y a dónde fue a parar Angeline Jolie. Tyrie tiene un cuerpo atlético pero de cara no se parece a Jolie, ni siquiera a la Lara Croft del video juego… sino que está más cerca de Patora, la hermana solterona de Patoruzú. Eso no quita que, a medida que avanza la película uno vaya olvidándose de la belleza “angular” de Tyrie (por ponerle algún nombre) y la vaya aceptando como la heroína que es.

Hay un enorme respeto por la mitología del personaje, lo cual es de agradecer. Los actores actúan, lo cual es raro en un fan film, y el elenco es muy variado – no es un cast de amigos, sino que son numerosos actores variopintos que dan performances casi profesionales -. Los diálogos y las situaciones son más que aceptables, incluyendo algunos parlamentos bastante buenos sobre la importancia del destino y el orígen del héroe – el director y guionista Stephen Reynolds parece sintonizar a Stan Lee en gran cantidad de los discursos -. Y cuando hay acción, es bastante potable: la secuencia del accidente aéreo es muy buena – calcada de Viven! -, y las peleas se dejan ver. Allí es cuando Anne Tyrie demuestra el por qué de su casting; su estado atlético le permite hacer escenas de riesgos sin dobles.

Mientras que las situaciones dramáticas entre Lara y su entorno están más que ok, las fallas del filme vienen por otros lados. Las secuencias de acción no son muy inspiradas y parecen rutina de filme para cable – Reynolds se deleita recreando poses de los videojuegos, pero quedan algo prepotentes si la acción es chata -. El otro punto es el tema de fondo – vinculado con el apocalipsis cósmico que predice el calendario maya – que suena a una sanata increíble e inútil. ¿De qué sirve encontrar un talismán que predice el fin del mundo en el 2012 si no se puede detener la catástrofe?. La verdad es que se podrían haber inventado otras excusas más creíbles para la aventura, pero al parecer los filmes de Tomb Raider nunca van a tener una premisa decente que sirva de pie para la historia. El último detalle es que la trama queda trunca – ¿pensada para una segunda parte? -, justo cuando empezaba a ponerse buena.

Tomb Raider: Ascension es una enorme proeza como fan film. Hay un buen despliegue de producción – vehículos, helicópteros, mansiones, cavernas -, un cast decente y una historia que se deja ver. Quizás aquí le regalemos algún punto de más por su esfuerzo, pero también lo hacemos porque es más potable y respetuosa con el personaje que sus pares hollywoodenses protagonizados por la diosa de los enormes pectorales.

LARA CROFT, SAQUEADORA DE TUMBAS

Los filmes basados en el videojuego Lara Croft, Tomb Raider, son: Tomb Raider (2001), Tomb Raider 2: La Cuna de la Vida (2003). Tomb Raider: Ascensión (2008) es un fan film basado en el personaje. Tomb Raider: Las Aventuras de Lara Croft (2018) es un reboot de la saga.