Crítica: Superman: El Serial (1948)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 1948: Kirk Alyn (Superman / Clark Kent), Noel Neill (Lois Lane), Tommy Bond (Jimmy Olsen), Carol Forman (Dama Araña), Pierre Watkin (Perry White), Charles Quigley (Dr. Hackett), Herbert Rawlinson (Dr. Arnold Graham)

Director: Spencer Gordon Bennet & Thomas Carr, Guión: George H. Plympton & Joseph F. Poland, sobre el serial radial escrito por Arthur Hoerl, Lewis Clay & Royal K. Cole, y basados en el comic de Joe Shuster & Jerry Siegel

Recomendación del Editor

Trama: Tras la explosión de su planeta natal Krypton, un niño llega a la Tierra en una cápsula espacial y es adoptado por la familia Kent, quienes lo llaman Clark y lo adoptan como hijo. El chico desarrolla superpoderes, crece y decide irse a la ciudad de Metropolis para combatir el crimen, utilizando su personalidad secreta de Superman. Ahora Kent ha conseguido trabajo en el periódico El Planeta y se encuentra cubriendo el robo del rayo reductor de relatividad, la arma más poderosa jamás construída por el hombre. Pero el rayo ha caído en las manos de la Dama Araña – la reina del hampa local -, y planea utilizarlo para apoderarse del mundo. Al enfrentarse a la Dama Araña, Superman sucumbe ante el poder de la kryptonita – el único material del universo que puede matar al hombre de acero – y queda sumamente debilitado. ¿Podrá el hijo de Krypton detener a esta implacable mente criminal? ¿Será que estos inescrupulosos villanos se saldrán con la suya?. Obtenga las respuestas de estas inquietantes preguntas la semana próxima, en este mismo cine y a esta misma hora.

Superman: El Serial (1948) Los seriales son tan viejos como el cine mismo, y los primeros datan de 1910, producidos por compañías como la Edison, Vitagraph y la Pathé. Se trataban de filmes muy largos divididos en capítulos de 20 minutos, los cuales siempre terminaban con los protagonistas en una situación de alto riesgo (usualmente, colgando de un precipicio; de allí es que reciben el nombre de cliffhangers), y que servían como enganche para que el espectador regresara a la semana siguiente para ver la conclusión de la escena. Mientras que en un principio eran la atracción principal de los cines, al estandarizarse la duración de los filmes en 90 minutos (y al aumentarse el valor de producción de los mismos) los seriales pasaron a ser parte de un programa de complemento: lo habitual era ver un par de seriales, el noticiero y un par de películas en la llamada función matineé de las salas cinematográficas de la época. Debido a su bajo costo y alta rentabilidad – un espectador terminaba por adquirir al menos 15 entradas para poder ver todos los capítulos de un serial, los cuales eran proyectados a lo largo de 3 meses y medio -, muchas productoras de seriales (como la legendaria Republic) pudieron obtener mejores números que muchísimos otros estudios de Hollywood, razón por la cual algunos grandes como la Columbia y la Universal incursionarían en el rubro durante algunos años. Con la llegada de la televisión en los años 50 asistiríamos a la decadencia y desaparición del serial, y los estudios especializados debieron reciclarse para producir tiras televisivas o, bien, desaparecer en el proceso.

El serial que ahora nos ocupa fue producido por la Columbia, y se basó en episodios escritos y utilizados en la emisión radial Las Aventuras de Superman (1940 – 1950). Contrataron a un ignoto actor de vaudeville llamado Kirk Alyn y se despacharon con esta aventura por capítulos, la cual terminó por transformarse en un enorme éxito. Tanto que, dos años más tarde, llegaría la secuela Atom Man vs Superman.

Considerando los pobres valores de producción de los seriales de la época, y la falta de prolijidad en adaptar superhéroes a la pantalla grande – vean sino los bizarros seriales de Batman (1943) o El Capitán América (1944) -, la versión 1948 de Superman es excelente. También es cierto que la DC (en aquel momento, Action Comics) obligó por contrato a los productores a que les permitieran supervisar la fidelidad de la adaptación. Esto derivó en que los capítulos iniciales del serial, en donde se detalla el origen del superhéroe y la explosión de Krypton, fueran absolutamente respetuosos de la esencia del comic. Como producción barata que es por su naturaleza, hay uso abundante de stock footage de explosiones y erupciones de volcanes, pero el resultado final es muy digno.

Muchos han criticado el detalle de que Superman, cuando vuela, es reemplazado por un dibujito animado (el cual es muy fluido, ya que usaron técnicas de rotoscopio para capturar el movimiento de los actores y luego dibujaron sobre sus figuras). Aquí la decisión se debe a una cuestión de presupuesto aunque, a mi juicio, es un detalle menor y no resulta molesto en absoluto (prefiero un dibujo animado de buena calidad en lugar de un FX terrible).

Pero dejando de lado el stock footage y los dibujos animados, Superman 1948 es un serial brillante. Es extremadamente respetuoso con el personaje, e incluso tiene el gran acierto del casting de Kirk Alyn, que es un Superman ideal (a mi juicio, muy superior a la versión televisiva de George Reeves). El diseño del traje es perfecto, con la capa surgiendo de los hombros como una toga romana, y Alyn tiene el rostro y el físico que demanda el rol. Es cierto que es algo campechano y entusiasta en exceso, pero tiene la dosis adecuada de carisma como para ocupar las botas rojas. Hasta la voz es acorde a la figura.

Durante el 80% de su duración Superman 1948 funciona de manera impecable. Tenemos el origen de Superman, la explosión de Krypton, su llegada a la Tierra, su crianza con los Kent y su partida hacia Metropolis. Como al parecer el periodismo no es una profesión sino una especie de oficio que se aprende sobre la marcha, el director del diario El Planeta le ofrece trabajo si consigue una primicia, cosa que obviamente ocurre al documentar la primera hazaña de Superman.

Hay algunos detalles curiosos para los fans. El nombre Superman termina por dárselo el mismo Kent en su primer artículo. Tampoco hay romance entre Lois / Clark / Superman. La primera aventura tiene al hombre de acero salvado a un tren de una via rota (una escena homenajeada en la versión 1978 de Richard Donner). La entrada del edificio de El Planeta se ve antigua y rococó, tal como ha aparecido en la serie Lois & Clark o en Superman Regresa. Y Alyn usa esos sombreros y sacos gigantescos que serían la marca de fábrica de George Reeves en la serie televisiva de los años 50.

Una de las mejores cosas que tiene el serial es que los personajes son inteligentes y actúan con lógica. La Dama Araña (un villano creado para el serial, y que bien podría ser la versión femenina de Lex Luthor) es sagaz y expeditiva, y uno debería felicitar a los libretistas por haber creado a semejante carácter. Los secundarios le van en saga, y hay buenos parlamentos. Por su parte, Lois Lane (Noel Neill, la que luego participaría en la secuela, en la serie de George Reeves, y que sería la anciana que mantenía a Kevin Spacey como amante en la secuencia de inicio de Superman Regresa) es insidiosa e inquieta como lo exige el papel, y marca el molde que más tarde usaría Margot Kidder para Superman 1978. Con excepción de un par de ocasiones, estos personajes no cometen estupideces. Es cierto que el libreto utiliza bastantes algunos artilugios narrativos que no suenan muy creíbles como para que la historia avance y genere el cliffhanger obligatorio de cada capítulo – hay un informante que está enterado de todo lo que pasa en la ciudad; mientras está con su identidad humana, a Clark Kent lo noquean en más de una ocasión; la oficina de Perry White funciona como una auténtica comisaría (como si fuera el despacho del comisionado Gordon), en donde se interrogan sospechosos y se notifican las amenazas de turno -, pero el resultado final siempre es tan disfrutable que uno perdona esas rebuscadas vueltas de tuerca. Es un filme que tiene un ritmo imparable; siempre pasan cosas, siempre la historia está en movimiento, hay margen para una enorme cantidad de proezas, y uno nunca tiene tiempo para detenerse y pensar en las fallas del libreto.

El problema con el serial 1948 de Superman es que la historia está demasiado estirada para caber en 15 capítulos, y ello se nota a partir del episodio 11. Las últimas cuatro entregas no avanzan la trama en lo más minimo, y son casí idénticas – Lois o Jimmy Olsen se meten en problemas, los mafiosos dejan alguna trampa explosiva, va Superman a salvarlos -, y el episodio final es rutinario y decepcionante (uno esperaba un climax más elaborado). Pero, si no fuera por ello, Superman 1948 merecería cinco atómicos con total justicia. Uno debe considerar que se trata de un filme enorme de cuatro horas y media de duración, en donde pasan millones de cosas todo el tiempo, y que resulta coherente que en algún momento los libretistas se queden sin aire. Por supuesto es un espectáculo más que disfrutable en donde el defecto, si cabe, es el formato mismo de serial que se le ha impuesto, en donde se llega a un punto en donde se deben estirar las cosas para cumplir con la cuota de capítulos pactados. Pero ello no quita que sea una gran aventura y una gran adaptación del personaje, de visión obligatoria para todos los fans del mismo.

SUPERMAN

Algunas de las versiones de Superman comentadas en este portal: Superman (serial de 1948) – Superman contra el Hombre Atomo (serial de 1950) – Superman y los Hombres Topo (1951) – Superman, la Película (1978) – Superman II: El Corte de Richard Donner (2006) – Superman III (1983) – Superman IV: En Busca de la Paz (1987) – Superman Regresa (2006) – El Hombre de Acero (2013) – Batman vs Superman: El Origen de la Justicia (2016) – La Liga de la Justicia (2017). A su vez Ilya y Alexander Salkind (productores del filme de 1978) desarrollarían la versión para la pantalla grande de Supergirl (1984). Supergirl (2015) es el piloto de una inminente serie de TV. La Muerte de Superman Lives: Qué Ocurrió? (2015) es un documental que analiza el fallido proyecto de filme que iba a ser dirigido por Tim Burton. Superman & Lois (2021) es una serie del ArrowVerse que analiza al Hombre de Acero casado, con hijos y viviendo de nuevo en Smallville. Zack Snyder’s Justice League (2021) es el corte del director de la versión 2017 de La Liga de la Justicia.