Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco
USA / Australia, 2003: Keanu Reeves (Thomas ‘Neo’ Anderson), Laurence Fishburne (Morpheus), Carrie-Anne Moss (Trinity), Hugo Weaving (Agente Smith), Gloria Foster (Oráculo), Lambert Wilson (El Merovingio), Helmut Bakaitis (El Arquitecto), Randall Duk Kim (El Cerrajero), Monica Bellucci (Persephone)
Director: Larry y Andrew Wachowski, Musica – Don Davies, Guión: Larry y Andrew Wachowski
Trama: Zion, la ultima ciudad de humanos libres de la Tierra, se encuentra bajo amenaza de ataque. Las máquinas han comenzado a excavar y se encuentran a horas de llegar hasta la ciudad. La población y la milicia se preparan para la última defensa, mientras Morpheus insiste en el cumplimiento de la profecía, de que Neo – el humano liberado de las celdas de energía de las máquinas, y que han demostrado poderes para manejar a la Matriz a su antojo – es el Elegido que puede poner fin a la guerra. Ante lo irremediable de la situación (250.000 calamares robot se aprestan a irrumpir en la ciudad), el consejo le da el visto bueno a Morpheus para llevar a Neo hasta el Oráculo y pedirle consejo sobre lo que ocurrirá. El Oráculo comienza a hablarle a Neo de programas independientes y renegados, que prosperan a pesar del control de la Matrix. Ella misma resulta ser un programa, así como el Cerrajero, quien posee el acceso a todos niveles de la Matriz. A través de él, Neo puede llegar a la Fuente, el núcleo de la Matrix, para desactivarla. Pero se suceden varios percances: el Cerrajero está bajo el poder de un programa conocido como Merovingio, que se dedica a acumular a otros programas que le brinden poder. Y a su vez está el Agente Smith, que tras la primera batalla con Neo ha terminado por mutar y reproducirse infinitamente, incluso infectando a un humano en el mundo real. Mientras Neo batalla con estos problemas, accede por fin a la Fuente, donde encuentra al Arquitecto – el creador de Matrix – , quien le explica que la naturaleza de la Matriz es repetitva, que esta historia se ha repetido seis veces anteriormente, y que la destrucción de Zion es inevitable. ¿Podrá Neo corregir el curso de la historia?
Matrix es un verdadero clásico de la ciencia ficción moderna, y un hito de culto. Pocas veces se pudo concretar una obra de sci fi que resultara inteligente, innovadora, y apta para todos los gustos – los de los críticos y los del público -.
Era lógico que se devengara una secuela. Pero como suele suceder con los hits que toman por sorpresa a sus autores, estos no se encontraban debidamente preparados para desarrollar una historia en el mismo grado de creatividad y complejidad que el original. Pasó con George Lucas y Star Wars, y pasó aquí con los hnos. Wachowski. Una cosa es deambular años por los estudios con un guión bajo el brazo e ir puliendo las ideas para que los productores aprueben el proyecto, y otra es contar con luz verde y el apuro de un estudio para concretar cuanto antes las secuelas de un hit. Como Lucas – estimo -, los Wachowski debieron haber contado con algún borrador de cómo podría seguir la historia de Matrix. Pero un borrador no basta para desarrollar y pulir una historia tan compleja en poco tiempo, si bien las secuelas se tomaron 4 años a salir a la luz.
Eso basta para mencionar el problema inicial de Matrix Recargado, que es el lapso de tiempo entre un film y otro. La gente tenía en el 2003 un muy buen recuerdo de la primera parte, pero no tenía frescos todos los conceptos del film. Una cosa es ver una historia hecha a grandes rasgos – por ejemplo, El Imperio Contraataca – después de unos años del original, y otra es ver algo tan cerebral como una secuela de Matrix. Además de que los hnos. Wachowski omiten hacer siquiera un breve prólogo para posicionar al espectador en el mundo que respira la historia, así como quiénes son los personajes. Resultaba indispensable.
Aún cuando estoy escribiendo esta review a pocos días de haber visto Matrix, ver Reloaded resultó más complejo de lo que pensaba. Especialmente porque Reloaded tiene un gran problema con los tiempos de las exposiciones. En las primeras secuencias, hay una reunion de capitanes de naves que están examinando las excavaciones hacia Zion que las máquinas han comenzado. Pero la secuencia es demasiado breve, todos hablan demasiado rápido y los datos son demasiados complejos. Así como ésta, hay otras escenas (la reunión con el Oráculo, el Merovingio, el Arquitecto) que crecen en complejidad y carecen de sentido didáctico como para que el espectador pueda digerir la información que brindan. Se ha perdido el sentido explicativo de los sermones de Morpheus en Matrix. Simplemente, si usted no vió la primera parte recientemente, Reloaded le va a resultar demasiado críptico.
Y no tenía razón para serlo. Después de todo, esas exposiciones donde se vomita información a raudales son apretadas por largos tiempos muertos donde se narran cosas que a nadie interesa. El romance de Neo y Trinity no funciona, lisa y llanamente; la llegada a Zion es una curiosidad, y toda la subtrama del ex amor de Morpheus así como el matrimonio del piloto Link es absolutamente banal. No le dan profundidad a los personajes, tampoco están bien escritos, y parece más un relleno para abaratar un poco el presupuesto incluyendo escenas sin efectos especiales.
Pero hay dos aspectos donde Matrix Recargado se destaca. Uno de ellos es en el apartado acción. Simplemente es descomunal. Supera en mucho a la primera parte, desde los tiroteos aéreos de Trinity, la pelea con cientos de Agentes Smith por parte de Neo, la lucha en la casa de El Merovingio o la impresionante secuencia en la autopista (se construyó una via de 4.5 km en un estudio de California para poder filmarla), que son inolvidables. Lo único que puede hacer el espectador es asombrarse y aplaudir por el delirio y el lirismo con que están filmados.
Pero si bien el apartado acción es impecable, es en el apartado trama donde la calidad es despareja. Además de la mencionada brevedad de las exposiciones centrales, se tiran algunas ideas que parecen no cuajar con la teoría general que conllevaba el film original. La exposición de el Oráculo, de que existen programas independientes y renegados, suena algo delirante. Si uno lo compara con informática, el Agente Smith se ha transformado en una especie de virus – el contacto con Neo en el primer film lo ha llevado a mutar su código -, lo cual parece coherente. Pero la explicación acerca de El Merovingio no resulta convincente – es como un programa mafioso (!) – ni tampoco el por qué tiene encerrado al Cerrajero. Si bien algunos paralelismos con los mecanismos de una computadora funcionan bien en la trama – la Fuente, las Backdoors -, la presencia de El Merovingio es una simple excusa para desarrollar la impresionante persecución en la carretera, y parece ajeno a la estructura del relato.
Pero donde genera sus mayores polémicas Matrix Recargado, es en la secuencia del encuentro de Neo y el Arquitecto. Establecida Matrix como una especie de droga virtual para que los seres humanos – que hacen de baterías vivientes para las máquinas – no puedan despertar ni rebelarse, el Arquitecto es el programador de la misma. Pero le explica a Neo de que la Matriz ha sido perfeccionada y relanzada seis veces. En cierto sentido resulta coherente con una explicación del Agente Smith en la primera parte – hubo una Matrix inicial que fue un Eden, pero resultó un desastre, ya que los humanos no pueden vivir en felicidad constante -. Pero tiene algo de disparate al mismo tiempo. Vale decir, la historia se ha repetido seis veces antes, hubo otros capitanes que creyeron en una profecía, hubo otros Neos y hubo seis destrucciones de Zion. Cada modelo fue perfeccionado de acuerdo a un programa – el Oráculo – que le permitió conocer al Arquitecto cómo hacer una Matrix más humana y funcional en cada nueva versión. Neo resulta ser una aberración del software – es una falsa fantasía de liberación así como una señal de que el ciclo está por cumplirse -. Pero resulta incoherente de que el Oráculo colabore con los humanos – le provee las píldoras rojas, guía al Elegido hasta la Fuente -, poniendo en riesgo todo el sistema. Tampoco resulta coherente de que, con cada destrucción de Zion, el Arquitecto deje libres fuera del sistema a un grupo de humanos independientes, que pueden atentar contra toda la estructura – ¿un riesgo calculado?-. No sólo esta escena resulta ser demasiado críptica sino que es, como el resto de las exposiciones, demasiado breve. A uno le cuesta digerir conceptos aún rebobinando la cinta en un video casero, imaginen lo mismo en un cine donde no existe esa posibilidad.
Matrix Recargado, a pesar de sus fallas, es un gran film de ciencia ficción. Es fascinante en lo visual, es denso en sus ideas, aunque quizás no todas sean brillantes o haya contradicciones en su lógica interna. Pero tiene un problema importante en su lenguaje cinematográfico. Narrativamente, es mas brusca y menos pulida que la primera parte, resulta demasiado criptica por momentos, lo cual termina por dejar al espectador librado a su suerte. Aún así, sigue siendo mucho más inteligente que muchisimas obras de ciencia ficcion que se han visto en los últimos tiempos.