Crítica: Godzilla vs Spacegodzilla (1994)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

Japon, 1994: Megumi Odaka (Miki Saegusa), Jun Hashizume (teniente Koji Shinjo), Zenkichi Yoneyama (teniente Kiyoshi Sato), Akira Emoto (mayor Akira Yuki), Towako Yoshikawa (Dr. Chinatsu Gondo)

Director: Kensho Yamashita, Guión: Kanji Kashiwa & Hiroshi Kashiwabara

Trama: En la isla de Natal, un equipo de la fuerza G intenta implantarle un chip a Godzilla para controlar sus acciones telepáticamente. Pero súbitamente aparece un monstruo similar a Godzilla, que ha llegado del espacio y comienza a destruir todo. Los científicos creen que se ha generado a través de células de Godzilla lanzadas al espacio durante su combate con Biollante, y que han mutado en una criatura mucho más poderosa. Ahora el nuevo monstruo – conocido como Spacegodzilla – comienza a arrasar Japón; y parece que sólo el Godzilla original será el único capaz de detenerlo.

Godzilla vs Spacegodzilla Godzilla vs Spacegodzilla es el penúltimo film de la era Showa de la gran G. Para esa altura la Toho había calentado motores y venía metiendo una película de Godzilla por año, con prácticamente el mismo staff de técnicos y actores. Se ven una gran cantidad de caras conocidas (Megumi Odaka, Akira Nakao) de filmes anteriores y posteriores del gigante verde.

Pero la realidad es que Godzilla vs Spacegodzilla es un film flojísimo. Actuaciones blandas, director sin talento, libreto disparatado e incoherente. Y eso ya es demasiado grave cuando uno ya ha mamado más de 50 filmes de sci fi japonesa y está acostumbrado al carnaval que supone el cine fantástico oriental.

Sinceramente ésta era una película que uno se venía relamiendo. Siempre consideré que los enemigos de Godzilla han sido unos mamotretos inmoviles o demasiado aparatosos, y que nunca se enfrentó a un contrincante de su altura. La idea de generar un clon espacial de Godzilla – con iguales o mayores poderes – es verdaderamente excitante y debería generar un match formidable. A su vez, para esta altura de la etapa Showa, los FX eran de gran calidad. La película posee unas escenas de gran belleza visual, con algunas tomas excelentes de la gran G – en especial cuando va en mitad de la jungla, con un paneo desde el suelo que se ve impresionante -. Pero…

La primera mitad – el setup de acontecimientos y personajes – es realmente lastimoso. El problema no es la cantidad de delirio (o droga) que tengan los guionistas encima, sino que disparan subtramas que abandonan así por que sí, y unas cuantas de ellas son completamente descolgadas. La idea de controlar telepáticamente a Godzilla no está taaan mal (dentro de los patrones de la serie) así como el concepto del monstruo espacial. Pero en el medio la siquica Saegusa recibe la visita de las diminutas gemelas guardianas de Mothra que le dicen poco y nada; hay un mayor renegado (cuyo amigo murió en la batalla contra Biollante) que quiere vengarse y que tampoco llega a concretar algo; hay un romance platónico idiota entre un militar y la síquica; la mafia japonesa aparece de la nada para secuestrar a Saegusa y poder controlar a la gran G; reaparece Mogera – el robot de The Mysterians – como un sucesor de Mechagodzilla pero totalmente inefectivo y ridículo. Para colmo, en la segunda mitad – los combates en las ciudades, que es donde usualmente los filmes de la Toho se redimen – las peleas monumentales son a puro rayo y sin nada de contacto personal entre los monstruos. Se trata de una lucha descomunalmente desabrida. La frutilla del postre es Godzilla Junior – un Minya algo más evolucionado pero siempre igual de ridículo – que termina por hundir aún más a la película.

Lo que queda claro es que Kensho Yamashita no tiene idea de cómo filmar un kaiju eiga y se nota. Las peleas son aburridas y breves, y le dedica un montón de tiempo a atender a una troupe de personajes banales. El guión deja la mayoría de las historias por la mitad y tampoco sabe como construir un poco de tensión – quizás sólo en el ataque de Spacegodzilla a Godzilla junior -, o crear algún artilugio que nos haga ansiar el clímax de destrucción. Y cuando éste llega, resulta soberanamente aséptico. Es una verdadera lástima, ya que el choque entre Godzilla y un enemigo similar daba mucho más para esperar. Así como está es un film mediocre para abajo, aburrido y sin demasiado interés, salvo los excelentes encuadres de Godzilla que anticipan una gran película que no pudo ser.

LA SAGA DE GODZILLA

Los filmes de la saga de Godzilla son: Godzilla (1954), Godzilla Raids Again / Gigantis the Fire Monster (1955), Godzilla, Rey de los Monstruos! (1956), King Kong vs Godzilla (1962), Mothra vs Godzilla (1964), Ghidorah the Three-Headed Monster (1965), Monster Zero (1965), Godzilla contra los Monstruos del Mar (1966), Son of Godzilla (1968), Destroy All Monsters (1968), Godzilla’s Revenge (1969), Godzilla vs Hedorah (1971), Godzilla vs Gigan (1972), Godzilla vs Megalon (1973), Godzilla vs Mechagodzilla (1974), Terror de Mechagodzilla (1975), Godzilla 1985 (1984), Godzilla vs Biollante (1990), Godzilla vs King Ghidorah (1991), Godzilla vs Mothra: La Batalla por la Tierra (1992), Godzilla vs Mechagodzilla (1993), Godzilla vs Space Godzilla (1994), Godzilla vs Destoroyah (1995), Godzilla 2000 (1999), Godzilla vs Megaguirus (2000), Godzilla, Mothra and King Ghidorah: Giant Monsters All-Out Attack (2001), Godzilla Against Mechagodzilla (2002), Godzilla: Tokyo SOS (2003), Godzilla: Final Wars (2004), Shin Godzilla (2016), Godzilla: Minus One (2023). Godzilla (1998) es la versión americana dirigida por Roland Emmerich; Godzilla (2014) es el reboot norteamericano dirigido por Gareth Edwards. Godzilla II: El Rey de los Monstruos (2019) es su secuela. Godzilla vs Kong (2021) completa la saga. – ¿Qué es el Kaiju Eiga? es un artículo que reseña los inicios y la historia del género japonés de monstruos gigantes.