Crítica: El Exorcista: la Serie (2016)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2016: Alfonso Herrera (padre Tomas Ortega), Ben Daniels (padre Marcus Keane), Hannah Kasulka (Casey Rance), Geena Davis (Angela Rance), Brianne Howey (Kat Rance), Alan Ruck (Henry Rance)

Director: Rupert Wyatt, Guión: Jeremy Slater, inspirado en la obra homónima de William Peter Blatty

Trama: Algo extraño ocurre con la hija mayor de los Rance. Después de tener un accidente automovilístico en donde muriera su mejor amiga, Kat ha permanecido encerrada y a oscuras en su cuarto. Angela, su madre, debe lidiar con ello mientras se hace cargo de su hermana Casey y de su padre Henry, el cual ha perdido lucidez y movilidad gracias a un ACV sufrido el año pasado. Luego de sentir voces y ruidos en la casa Angela ha decidido acudir al sacerdote del barrio, el padre Tomas, quien – reticente – acepta ir a visitar la casa de los Rance. Pero la hija mayor es hostil y sólo atina a agredir verbalmente a su padre en la cena en la que participa Tomas. Sin descubrir nada extraño el cura se apresta a partir… hasta que Henry le empieza a contar un sueño que Tomas ha tenido, y le da la dirección de un cura especializado en exorcismos. Estremecido, Tomas sigue las indicaciones para dar con el paradero del padre Marcus Keane, el cual se encuentra enclaustrado luego de un fallido exorcismo en la ciudad de Mexico (y en donde falleciera un niño). Al darle las indicaciones, Marcus se da cuenta que el Maligno le está buscando y ha guiado a Tomas a su recinto. Reconociendo que su destino está marcado y que su misión en la Tierra es lidiar con el Demonio, Marcus se apresta a ir a Chicago y visitar a los Rance, aunque ello signifique poner en juego su vida para salvar a esa familia de las garras de las fuerzas malignas que los han apresado.

Geena Davis se escapa del museo de cera y entra en conversación con el padre Tomás en El Exorcista: la Serie (2016) Geena Davis se escapa del museo de cera y entra en conversación con el padre Tomás en El Exorcista: la Serie (2016)

El Exorcista: la Serie Ahora el nuevo concepto en Hollywood es reimaginación. Tome una historia super conocida, mantenga el esqueleto, ponga otros personajes con otros nombres y personalidades. El curso de la historia será igual, pero hay variantes que terminan por hacerla diferente y hasta novedosa. El Exorcista: la Serie es una reimaginación del filme clásico de 1973, posiblemente la mejor película de terror de la historia. El dato curioso es que la nueva versión funciona (y muy bien) gracias a un excelente cast, un libreto limpio y eficiente y la dirección del genial Rupert Wyatt (El Planeta de los Simios: (R)Evolución). Como siempre dije, la personalidad de una tira la da el responsable del piloto y, en el caso de Wyatt, la efectividad es realmente muy alta. Considerando que uno espera lo peor de una tira de terror producida por una de las grandes cadenas estadounidenses (pacatas, reticentes a la carnicería), El Exorcista: la Serie estremece y se asoma con una serie de horror tan efectiva como inteligente.

No está el padre Merrin, Regan o siquiera Karras. Aquí hay una familia envuelta en un par de tragedias familiares: la primera es que el patriarca (Alan Ruck, destinado de por vida a esos papeles de gentiles de buen corazón y suerte pobre) ha sufrido un ACV y es una sombra de lo que era. El liderazgo lo lleva Angela (Geena Davis, tremendamente deforme por las malas cirugías, pero dando clase magistral de actuación a pesar del aspecto físico), que ahora debe lidiar con otro drama: su hija mayor Kat se vió envuelta en un accidente automovilístico, su mejor amiga falleció como consecuencia de ello, y ahora la chica se encuenta enclaustrada, solitaria y extremadamente agresiva con el resto. Los Rance intentan sobrellevar la tristeza con su fe religiosa, acudiendo todos los domingos a la misa del padre Tomas, un cura de ascendencia latina cuya fe no está muy firme que digamos. Cuando los ruidos raros y las voces aparecen en lo de los Rance, la Davis vuela a pedir ayuda a Tomas – en un dialogo formidablemente inspirado: “en mi casa hay un demonio”; “señora Rance: los demonios son metáforas que creó la Iglesia para representar a la depresión, las enfermedades mentales,..”; “sí, ya lo sé; ¿cómo cree que me siento, sabiendo eso, viniendo acá, y contándole esta historia acerca de un demonio en mi hogar?” – y, cuando Tomas acepta ayudarlos, comienza a tener visiones – en un villerío de emergencia en Mexico, en donde un cura lucha con un niño poseído, con los ojos inyectados en sangre, atado a la cama y vociferando en lenguas desconocidas -, las cuales son demasiado reales para ser simples sueños. Y una vez que Tomas ve cosas raras – pájaros estrellándose contra las ventanas de su iglesia y guillotinándose a propósito con los vidrios rotos; voces extrañas, ruidos en el techo como si alguien estuviera corriendo muebles y, sobre todo, que el letárgico Alan Ruck le comience a hablar sobre el exorcista que vió en sueños y le indique dónde ubicarlo -, al curita se le mojan los calzones y sale corriendo a ubicar al padre Marcus, el equivalente de Lancaster Merrin y el cual está magistralmente interpretado por Ben Daniels. Daniels parece un agotado héroe de acción, un tipo duro y curtido que está cansado de lidiar con demonios y que éstos siempre terminen ganándole la partida.

Es en el último tercio del piloto en donde El Exorcista: la Serieque venía asomando las garras – termina de sacarlas del todo y muestra el pedigree que le hace honor al nombre. No sólo por el shock de las revelaciones, sino por ver a Daniels preparándose a lo Rambo y partiendo a Chicago presto a pelear con el demonio mientras suena Tubular Bells con toda la furia. Es un final emocionante para quien conoce la franquicia, y que anticipa shocks y sorpresas por igual.

El Exorcista: la Serie es altisimamente recomendable. Es inteligente, shockea, no le hace asco a hundir el cuchillo donde corresponde, y es tremendamente efectiva. Ojalá el resto de la serie le vaya en saga, lo que daría lugar a una de las tiras de terror mas memorables de la televisión mundial.

LA SAGA DE EL EXORCISTA

El Exorcista (1973) – El Exorcista II: El Hereje (1977) – El Exorcista III (1990) – El Exorcista: El Comienzo (2004) – Dominion: Precuela de El Exorcista (2005) – En el 2016 rodarían una reimaginación de la historia en formato televisivo con El Exorcista: la Serie (2016)