Crítica: Appleseed Ex Machina (2007)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

Japon, 2007: Ai Kobayashi (Deunan), Jûrôta Kosugi (Briareos), Mami Koyama (Athena)

Director: Shinji Aramaki, Guión: Haruka Handa & Tsutomu Kamishiro sobre el manga homónimo de Masamune Shirow, Musica – Haruomi Hosono

Trama: En el año 2131, la utópica ciudad de Olimpo se ubica como un faro que guía a las naciones sobrevivientes de la guerra nuclear hacia la pacificación y la unión universal. Olimpo es una ciudad compuesta mayoritariamente de bioroides, clones humanos carentes de sentimientos, e ideales para liderar la política mundial de manera pacífica. Pero extraños sucesos comienzan a acontecer a medida que se acerca una cumbre de líderes mundiales en la ciudad: numerosos ciborgs – humanos con partes de reemplazo cibernético – parecen haberse salido de quicio y comienzan a cometer atentados. A su vez, un dispositivo multimedia conocido como Connexus parece estar generando una extraña influencia en la población. Y mientras tanto Deunan ha entrado en un programa experimental de la fuerza policial ESWAT, probando como compañero a un bioroide diseñado para el combate que ha sido clonado a partir de su ex amante Briareos. Entre Deunan, Briareos y el bioroide Tereus, comienzan a descubrir que todo es parte de una conspiración para abatir al gobierno de Olimpo y obtener el control mental de la población mundial.

Appleseed Ex Machina Esta es la secuela de la espectacular adaptación del manga de Masamune Shirow, puesta en escena por Shinji Aramaki. Aquí Aramaki regresa como director, y con unos cuantos pesos pesados detrás de esta nueva producción, demostrando el impacto e interés que la original Appleseed había causado. Tanto la Sega como la Toei figuran entre los respaldos financieros, y la producción general queda a cargo de John Woo. Es obvio que tantos intereses sólo se encuentran empeñados en producir otro hit del calibre del film original.

El problema (y ahi vamos de nuevo …) con Appleseed Ex Machina es que, a pesar de todos los cuidados, no llega a la altura de su predecesor. Seamos claros: el libreto tiene algunos agujeros aquí y allá, hay bastante de predecible, y no hay demasiada continuidad con la historia previa. A nivel técnico sigue siendo un anime impresionante, aunque parece algo más desprolijo en la calidad de algunas escenas. Pero vayamos por partes.

Appleseed Ex Machina continúa la historia narrada en Appleseed, en donde una ciudad compuesta por clones humanos y carentes de sentimientos se erigía como el último bastión para la supervivencia del resto de la raza humana. Mientras que el primer film tenía un caracter mucho más empático – ibamos descubriendo que parte de la historia de Olimpo se relacionaba con el pasado de Deunan; existía toda una urgencia en detener la inminente masacre de los bioroides por parte de los humanos opositores -, aquí la historia empieza de un modo bastante inconexo con la trama original. Uno podría haber cambiado la fisonomía y el nombre de los personajes, y ponerle otro nombre al film que no entrara en el canon de Appleseed, y el resultado hubiera sido similar.

La cuestión es que ya hay un hueco de lógica desde el vamos en relación a la historia original. Ahora existen naciones humanas – que aparecieron de la nada, mientras que en la Appleseed original Olimpo era la última ciudad de la Tierra, y el resto de la humanidad vivía en la anarquía -, y hay una cumbre. Hay también una corporación superpoderosa que suministra tanto tecnología militar como civil: desde partes de ciborgs hasta una suerte de iPods del futuro. Como puede verse, la conspiración es bastante evidente y no hay mucho suspenso en esto. A esto se suma un comienzo a pura acción, lleno de acrobacias floridas en donde resulta evidente la influencia de John Woo – hay duelos a la mexicana, palomas volando, etc -, que parece descolgado del estilo que tenía la saga. La serie Appleseed tenía su propia personalidad en cuanto a las escenas de acción, pero la primera secuencia es pura explosión barata al estilo de Hollywood. Por suerte sólo pasa en esa oportunidad, ya que el resto de la película vuelve a sus carriles habituales.

Hay un intento de profundizar en la relación entre Deunan y Briareos que, en principio no es exitoso, pero que termina por encontrar su rumbo hacia el final. Es una pena que la calidad de esas escenas sea tan variable, porque la relación platónica entre la humana y el ciborg resulta muy interesante – al estilo de la oficial Lewis y Robocop -; y a esto se suma un ingrediente realmente original, que es emparejar a Deunan con el clon bioroide de Briareos, donde uno posee el físico y el otro el alma. Pero el libreto no termina por hundir el cuchillo en el desarrollo dramático del desparejo trío, obteniendo unos tibios resultados.

El tema es que Appleseed Ex Machina parece haber perdido por el camino el carisma que hacía tan disfrutable a Appleseed. Es posible descubrir a miles de kilómetros de distancia quiénes son los villanos y qué es lo que traman. Las escenas de acción están muy bien, pero les falta algo de nervio. Salvo el trío principal, el resto de los personajes hacen de cartón pintado – Athena, Hotomi y otros sólo pintan como cameos extendidos -. Y si bien la animación sigue siendo espectacular, por momentos la mezcla de estilos resulta chocante. Hay escenas en que los caracteres son dibujos excelentes y capaces de demostrar sentimientos; pero en el caso de las secuencias donde los personajes pasan a ser CGI, estos pierden todo trazo de humanidad. En la Appleseed original esto no sucedía, simplemente porque la técnica no estaba tan avanzada – y eso emparejaba el nivel de animación al momento de que los caracteres actuaban -. Mientras que aquí se ven edificios, máquinas, escenarios con un grado de realismo increíble y superior al film original, la movilidad facial de los personajes parece salida de un videojuego. Existen momentos en que la diferencia de calidad resulta chocante.

(atención: fuertes spoilers) Y el otro problema es el final. Es sencillamente disparatado. Hubiera resultado más coherente resucitar a los villanos de la primera parte – los militares humanos – que poner a una especie de Reina Borg (y no por voluntad propia, sino por designio de un científico chiflado) a dominar mentalmente a toda la humanidad. Toda la secuencia final parece efectivamente un Deus Ex Machina, sin mucha coherencia con lo antes visto, y termina por decepcionar. (fin de los spoilers).

La conclusión es que Appleseed Ex Machina es un muy buen film si usted no ha visto el anterior. Pero si sigue la saga, resulta algo desilusionante. Choca con la continuidad de la historia, la trama no es muy original, y copia estilos de muchos lados (desde John Woo pasando por el ataque de los calamares cibernéticos en Matrix Revoluciones, hasta Star Trek. First Contact). Pero tiene unos efectos especiales espectaculares y la trama no aburre.

LA SAGA DE APPLESEED

La saga basada en Appleseed consta de: Appleseed (2004) y Appleseed Ex Machina (2007)